Nerón el paciente, el tranquilo, el cariñoso, el cortes, no solo era su belleza espectacular por fuera, su gran belleza, la más bonita, la que me enamoro desde el día que lo conocí fue la interior, ese belleza que solo los que estamos dispuestos a conocer a los perros desde dentro, somos capaces de ver, Nerón no era un buen peinado, ni una buena pose en un ring, era mucho más, era un perro lleno de alegría y felicidad que sabía contagiar a cualquiera.
Recuerdo tantos buenos momentos vividos con él, tantas anécdotas, y tantos viajes, tantos kebacs...
Siempre te recordaré cuando intentabas enseñar a Drac a portarse bien, cuando pacientemente dejabas que te mordisqueará las orejas, cuando aullabas de alegría, cuando querías jugar con Zar, cuando te metías en cualquier charco a disfrutar del agua fresquita.
A mi niña, mi pequeña saltamontes, mi gran amiga te juro que no encuentro ni una sola palabra de consuelo, a la vez me siento tan rota por no poder evitar este sufrimiento, conozco a pocas personas que hayan luchado tanto por su "gordi" a pesar de los batacazos siempre has conseguido ponerte en pie y seguir luchando por él, por desgracia el momento ha llegado y estoy segura de que él estaba de acuerdo, de que él si ha tardado en marcharse hasta ahora era porque no quería dejarte, porque sabía que tu dolor iba a ser tan profundo que no quería verte sufrir. Le has dado todo lo que él necesitaba, tu cariño, tu fuerza, tu constancia.
Allá donde este Nerón te estará esperando, y te recibirá con ese aullido que a ti tanto te gustaba.
